En el mes de noviembre se celebra para mí uno de los días más bonitos, que debería ser fiesta y que muchos desconocen, 20 de noviembre “DÍA INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS DEL NIÑO/A”.
En 1959 la Asamblea General de Naciones Unidas aprueba la declaración de los derechos del niño. Tras finalizar la segunda guerra mundial es cuando se inició este proceso, porque en la sociedad quien más tiene que perder son los niños. Y algo muy importante es que se habla de los derechos de los niños hasta los 18 años, jurídicamente son considerados niños y se deben proteger sus derechos hasta los 18 años.
UNICEF en su página web dice:
“Trabajamos incansablemente para que los derechos de todos los niños y niñas, en todo el mundo, sean una realidad. PARA QUE LOS NIÑOS SOLO SEAN NIÑOS. NUESTRA PRIORIDAD ES QUE NINGÚN NIÑO O NIÑA SE QUEDE ATRÁS”.
Creo que poco queda por decir tras esas dos frases, o a lo mejor si es necesario que todos repasemos cuales son los derechos de los niños, sea con sea su edad y sus características, la rapidez de la vida que vivimos nos hace olvidarlos. Vamos a repasar, porque yo leyendo estos derechos sentí que muchos no cumplo.
- Derecho a la vida
Cada niño tiene derecho a la vida. Es competencia de los gobiernos asegurar que los niños y niñas sobreviven, crecen y se desarrollan alcanzando su MAYOR POTENCIAL.
- Derecho a la salud
Todos los niños y niñas tienen derecho a la salud. Durante su CRECIMIENTO Y DESARROLLO deben disfrutar del nivel más alto posible y recibir atención médica siempre que lo necesiten.
- Derecho a la protección
La violencia, los malos tratos, la explotación, los abusos… Son muchos los peligros que AMENAZAN a los niños y pueden afectar a su desarrollo.
- Derecho a la educación
Todos los niños y niñas deben acceder a una educación de calidad que les permita DESARROLLARSE FISICA Y MENTALMENTE (yo incluyo emocionalmente) hasta el máximo de sus posibilidades. Asegurar que las escuelas tienen una educación inclusiva. Y matizo que la inclusión no es exclusiva de la escuela.
- Derecho a una identidad
Nada más nacer, el nombre de todos los niños y niñas debe ser inscrito en los registros oficiales. Si no consta en estos registros permanecerá INVISIBLE el resto de su vida.
Tristemente en España hay alrededor de 18.000 niños/as invisibles, viven en centros, cuando su derecho es hacerlo en familia, comprometerse con la infancia incluye poder ser familias de acogida para esos niños.
- Derecho a una información de calidad
Los niños tienen derecho a obtener información de diversas fuentes, nacionales e internacionales, como Internet, la radio, la televisión y los periódicos. Los adultos deben velar por que la información que reciben no sea perjudicial. Los niños y niñas deben ser PROTEGIDOS FRENTE A INFORMACIÓN, CONTENIDOS Y ACTITUDES DAÑINOS PARA SU DESARROLLO, pero también ellos mismos ven valiosas oportunidades para el acceso a la información, la educación, el ocio y la expresión de sus opiniones.
- Derecho al juego
Jugar, reír, soñar… Todos los niños tienen el DERECHO DE SEGUIR SIENDO NIÑOS DURANTE TODA SU INFANCIA. Por ello es muy importante que tengan tiempo y oportunidades para el ocio y las actividades culturales.
- Derecho a expresar su opinión y ser escuchado
Los niños tienen mucho que decir, especialmente cuando se va a tomar una decisión que les afecta directamente. Por eso tienen todo el derecho a EXPRESAR LIBREMENTE SU OPINIÓN Y SER ESCUCHADOS. Os pregunto, ¿sabemos escuchar?
- Derecho a la intimidad
Los niños y niñas tienen derecho a la vida privada. Educar a los niños y niñas en el DERECHO A LA PRIVACIDAD y en proteger sus datos personales es responsabilidad de sus familias y de las administraciones. Los riesgos, especialmente en el contexto digital, son grandes y no son siempre evidentes para los niños, los padres o compañeros.
- Derecho a asociarse
Los niños pueden FORMAR GRUPOS O UNIRSE A ELLOS, siempre y cuando los fines sean pacíficos y respeten los derechos de las otras personas.
La visibilidad pública y las oportunidades de establecer redes en el entorno digital también pueden apoyar el activismo dirigido por los niños y EMPODERARLOS COMO DEFENSORES DE LOS DERECHOS HUMANOS.
El ser humano es un ser muy interesante, y cuando uno lee estos derechos, y en su primer artículo dice “Es competencia de los gobiernos asegurar…”, nos quitamos la responsabilidad y hacemos responsable de todo a los gobiernos, no huyamos, desde que cumplimos 18 años tenemos la obligación de proporcionar a todo niño/a estos derechos. Nadie queda excluido de esta obligación. Cada padre, madre, profesor, médico, terapeuta, jurista, funcionario, policía, vecino, joven, cada ciudadano debe desde su papel en esta sociedad cumplir estos derechos, no uno sino todos.
En todos estos derechos se recoge otro derecho más, para mi fundamental, es el derecho a respetar “LA INDIVIDUALIDAD DEL NIÑO”. No existen dos niños iguales, ni físicamente, ni mentalmente, ni de personalidad, solo respetando y viendo esa individualidad es cuando ese niño puede crecer y madurar.
Cada niño debe ser mirado, escuchado y sentido desde esa individualidad. Los adultos debemos eliminar de nuestra mente todo juicio, expectativa y creencia de cómo es o cómo debe ser un niño, sino vamos a entorpecer su proceso.
En el primer derecho del niño dice: “asegurar que los niños y niñas sobreviven, crecen y se desarrollan alcanzando su mayor potencial”. Aquí nos recalca que cada niño tiene un potencial y que todos debemos ayudarle a desarrollar al máximo, pero sin olvidar que ese potencial es individual, por tanto, no podemos ver a todos los niños por igual ni darles los mismos recursos.
Todos decimos cuando hablamos de los niños, “ELLOS SON NUESTRO FUTURO”, en 2021 la población de 0 a 18 años en España era de 8.630.812, un 18,21%, muchos seres únicos y maravillosos que tenemos en este país. Si ellos son el futuro deben ser respetados estos derechos desde su individualidad.
Preguntaros si cumplimos estos derechos: dejamos a los niños ser niños, les ayudamos a lograr su máximo potencial, cuidamos de su salud, les damos la mejor educación, protegemos a nuestros niños correctamente, les proporcionamos y respetamos su identidad, se les da la información a la que tienen derecho, los niños tienen tiempo para juego (con lo importante que es para el desarrollo físico, mental, social y emocional), son escuchados, les enseñamos la importancia de proteger su intimidad, les animamos a que aprendan a proteger sus derechos.
Debemos luchar por los derechos de todos los niños, no separemos.
Mucho que reflexionar en este noviembre, no podemos empezar a cambiar el mundo sino hacemos cambios cada uno en nuestra mirada hacia los niños.
Próximo artículo: «Los niños también tienen amígdala.»